QUISO EL AZAR O EL DESTINO por Gabriel José León
Quiso el azar o el destino
que en depresión yo sumido
fuera por la poesía
de un trovador conmovido.
Por armas él no portaba
de tortura las espadas,
más bien las de fermosura:
versos, ritmos y tonadas.
Mas no le hace falta lanza
para rendir su enemigo,
trovando con elegancia
la ignorancia ya ha vencido.
Pues sepa usted que entre risas
y entre canciones hermosas
un juglar enseña cosas
que hasta los sabios precisan.
Lo vi tocar su zanfoña
mientras narraba relatos
de príncipes en harapos
y reyes que buscan gloria.
Luego rasgó su guitarra
acompañando romances
que a las gentes del teatro
todas dejaron en trance.
Mas teniendo yo madera
de relator y cronista
quise que me concediera
una pequeña entrevista.
Sentóse a beber conmigo
su copa mientras contaba
cómo en música y palabra
su vida se ha convertido.
Y quien lo escuchase hablar
de todos sus instrumentos
de tradición medieval
y que se cuentan por cientos,
sin duda preguntaría
por curiosidad movido:
dime dónde has aprendido
el mester de juglaría.
Aquello se preguntó
y respondióme el buen señor,
llegaba desde León,
su nombre: Crispín d’Olot.